Hoy vamos a hablar un poco del
objetivo a fijar en estas operaciones de Swing Trading.
Si lo habéis notado cuando hablamos
de un determinado precio de entrada o de un stop loss nos referíamos siempre al
céntimo casi. Algo muy concreto y
determinado. En el caso del objetivo es algo más complicado. Vamos a ir por
fases.
Si estamos en una tendencia alcista
y se producen las premisas de compra acordadas capítulos atrás lo que esperamos
como mínimo es que el precio alcance el anterior máximo relevante. Esa será
siempre de inicia nuestra primera zona objetivo.
El problema es que en fuertes
tendencias alcistas, muchas veces el valor va mucho más allá de su anterior
máximo relevante y no es muy agradable
ver como sigue subiendo más allá de nuestro objetivo. Vamos que se nos queda
cara de tontos pensando, porque no estoy ahí!!!
Una de las posibles soluciones es
adoptar la técnica de la toma sucesiva de beneficios. (ojo, las comisiones
tienen que ser bajas…) Esto es tan sencillo como ir fijándonos unos objetivos
consecutivos (el primero ya lo sabemos). Lógicamente, esto lo que nos permite
ir asegurando unos beneficios mientras dejamos el resto de la inversión en
búsqueda de la gran subida.
Otra de las soluciones es ir
subiendo el stop en la última parte de la operación. Voy a entrar un poco en
detalle en esto de cuando ir subiendo el stop pero antes me gustaría resaltar
algo importante de la relación entre stop y objetivo.
La distancia entre el precio de entrada y el objetivo, comparada con
la distancia entre el precio de entrada y el stop es conocido como el ratio
rentabilidad – riesgo. Muchos inversores usamos este ratio como una criba para
ver si una operación es o no interesante. Por ejemplo, para ganar 1€ tienes que
arriesgar 1€ la operación se convierte en no interesante. Lógicamente no hay un
estándar porque depende de cada cartera, de cada perfil inversor, etc, pero un
ratio inferior a 3/1 no suele resultar atractivo. Hay que buscar más opciones
en el mercado, que seguro que las hay. Ahora el mercado es global…
Vamos a volver al asunto de ir
moviendo el stop inicial. Naturalmente, no tiene ningún sentido mantener el
stop en su situación inicial si hemos acertado el movimiento el valor continúa
subiendo tal y como preveíamos al comenzar la operación.
Recordemos que al entrar, fijamos
el stop en el mínimo de la sesión del día de entrada o en el previo, el que sea
inferior. Mantendremos el stop en ese nivel durante los primeros dos días, es
decir, el día de entrada y el siguiente. En el tercer día, subiremos el stop
justo por debajo del mínimo del día dos y en el cuarto día justo por debajo del
mínimo del día 3. Es sencillo, no? . Ojo, acordaros que esto no entra en
funcionamiento hasta el tercer día de inversión. Esto se debe a que tenemos que
dejarle un poco de “espacio” para que el movimiento se desarrolle.
Otra opción que tenemos es la
siguiente. Esperamos a que el precio de la acción alcance la mitad del camino
hasta el objetivo. Por ejemplo, si el objetivo es que suba 40 pipos, sólo
comenzamos a mover el stop hacia arriba
cuando ya haya avanzado 20 y a partir de ahí comenzamos a seguir la misma
técnica de antes, vela a vela.