Continuamos con el ciclo de la
acción que veníamos describiendo. Lo
habíamos dejado en que tras la etapa de descenso continuado teníamos a los
vendedores exhaustos y por ello los
compradores podían llevar a la acción a niveles no vistos hace tiempo. Incluso
deberían aguantar bien la acción cuando los vendedores que habían quedado enganchados
durante el descenso vendan al recuperar algo de sus pérdidas. De hecho, los
compradores serán cada vez más agresivos en cada pullback lo que hará que
comiencen a formarse mínimos cada vez más altos.
Si nos fijamos acabamos de
encontrar los dos requisitos para una tendencia alcista: mínimos y máximos
crecientes. Lo que está ocurriendo de hecho es que estamos entrando en la
siguiente etapa del ciclo, la etapa 2 que representa la tendencia alcista del mismo.
La emoción que domina la etapa 2 es la avaricia. Este período alcista muy a menudo se convierte en un
período de exuberancia irracional como diría Greenspan. Es el momento donde la
mayoría de la gente hace el dinero, básicamente porque es sencillo acertar.
Después de un período de tiempo
con una clara subida, la acción comienza a nivelar su recorrido y a moverse
lateralmente. La razón, una vez más, es muy sencilla. Hay una cantidad de
dinero finita disponible para un número también limitado de compradores y en un
momento determinado simplemente se acaban los compradores. Si eso es así ¿por qué
inmediatamente no se hunde la acción? Algunas veces si que ocurrirá eso y es lo
que también llamamos giro a la baja en V y al igual que en el giro en V al alza
que vimos en el capítulo anterior es muy difícil de aprovechar. No obstante, la
mayoría de las veces el valor no caerá inmediatamente porque la acción todavía
conserva la fortaleza de la etapa 2 y los poseedores de la acción no tienen razones para venderla.